Jun 14 2011
INCONVENIENTES DE COMPRAR UN COCHE USADO
La semana pasada estuvimos analizando las ventajas de comprar un coche usado. Para compensar un poco, hoy vamos a detenernos en las desventajas. Es evidente que dependiendo de hacia qué lado de la balanza se incline cada uno, se centrará más en uno u otro grupo de argumentos a la hora de decidir. Los que son partidarios de la compra de vehículos de ocasión, se fijarán más en las ventajas; mientras que los opuestos no verán más que inconvenientes y pegas. Pero esto es lo bueno que tiene un mercado grande en el que hay suficiente oferta para todo tipo de clientes, bolsillos y pareceres.
Aquí vamos con las pegas:
- Mayor probabilidad de averías.
La pega más generalizada que ponen los que están en contra de comprar coches de segunda mano es que la posibilidad de que se averíen es mucho mayor, ya que los vehículos a motor suelen fallar más conforme más tiempo de uso tengan. Lógicamente, este problema puede verse minorizado si la compra se efectúa en un establecimiento solvente, que revise los coches antes de ofertarlos y que repare los posibles desperfectos cubriéndolos por una garantía.
- Es difícil saber cómo fue tratado el coche por el anterior propietario.
Enlazando con el punto anterior, una gran desventaja que tiene la compra de un automóvil de ocasión es que es muy difícil saber cómo era el anterior dueño, si era descuidado o pasota, si realizaba el mantenimiento periódico, si era cuidadoso con el vehículo,… Un uso correcto es garantía de una mayor duración. Por eso hay una clase de conductores que no suelen tener problemas a la hora de vender sus coches a conocidos y familiares, ya que son famosos por su buen trato a los vehículos y eso le da confianza al posible comprador.
- No hay coches usados a medida.
Un comprador de vehículos de segunda mano tiene que adaptarse a los modelos que le ofertan. Tal vez quiera un deportivo de una marca concreta, con cambio automático, con navegador y en color negro. Pero sólo encuentra uno en color azul marino. Hay que ser conscientes de que los coches usados no van a cumplir con todas las características que se buscan a priori, ya que no se han fabricado a medida. Por eso no queda más remedio que amoldarse a lo que hay.
- Es díficil encontrar financiación.
Normalmente las entidades financieras son más reacias a financiar coches viejos o los plazos que proponen son muy cortos y las cuotas son elevadas. Sobretodo en los casos de financieras que establecen reservas de dominio sobre el vehículo financiado. Aunque no es tanto problema para automóviles seminuevos, con dos o tres años, ya que los plazos de financiación son más largos y flexibles. Para coches con más de diez años puede ser un verdadero problema ya que la única forma de encontrar financiación sería acudiendo a un préstamo al consumo, con tipos de interés elevados.
Javi
17 febrero, 2012 @ 3:27
No estoy muy de acuerdo con que los vehículos con más años son más propensos a las averías. Si bien es cierto que el uso provoca el desgaste de piezas, no menos cierto es que por ejemplo un km0 que se haya tirado 1 o 2 años en una campa esperando comprador es incluso más propenso ha averiarse que uno con varios años. Y es que, los conductos y la electrónica sufren mucho en un coche parado(la electrónica por la variación de temperaturas, y los conductos porque se acaban atascando, ya que un vehículo nuevo jamás tiene 0 km, y por tanto por esos conductos a corrido aceite, gasolina, agua etc…)
Ricardo Botín
17 febrero, 2012 @ 12:04
Los fabricantes suelen tener establecidos unos protocolos de mantenimiento periódico para coches en campa con más de un determinado tiempo. Incluso así, habrá que ver si lo cumplen o no. Ya sabemos que en cuestiones de calidad se centran mucho en documentar las intervenciones con papeles y más papeles, sin preocuparse de comprobar los coches.