Oct 26 2011
LOS NUEVOS HÁBITOS DE TRANSPORTE DE LOS JÓVENES
Leo con interés una noticia en Reuters que informa de una investigación desarrollada en Alemania sobre jóvenes menores de 30 años y su relación con los automóviles. Sus conclusiones son muy claras, ya que los estudiantes alemanes de ahora aparentemente «pasan» bastante de los coches, prefiriendo la bicicleta o el tren a la hora de realizar sus desplazamientos habituales.
El Instituto de Tecnología de Karlsruhe ha analizado las formas de viajar de 1.500 jóvenes germanos durante intervalos de una semana cada otoño desde 1994. Gracias a los datos recabados, se puede comprobar que este colectivo (entre 18 y 30 años) circula menos kilómetros –en concreto, cuatro kilómetros a la semana menos que en 1995- en automóvil. Lo que me resulta sorprendente es que los desplazamientos no han disminuido, ya que en el mismo período de tiempo la distancia recorrida en transporte público se ha incrementado en cinco kilómetros y medio.
El informe resalta también que están demorándose más en sacarse el carnet de conducir y en comprar su primer vehículo, lo que indica que la tradicional atracción que siempre han sentido los jóvenes por los coches parece estar disminuyendo. Según el Instituto, esta pérdida de importancia se debe sobretodo a la mejora en el transporte público, al carsharing, al alquiler de bicicletas y al aumento de las transacciones on line que obliga a los jóvenes a desplazarse menos para realizar sus compras.
De hecho, los fabricantes alemanes no están preocupados por lo que parece un cambio en los hábitos de sus clientes, ya que son conscientes de que las ciudades universitarias alemanas suelen ser pequeñas, con lo que los estudiantes no necesitan disponer de un automóvil hasta que no terminan sus estudios. Según han explicado, lo que está sucediendo es que se está retrasando algo más de lo normal la adquisición del primer vehículo. Para entender la buena salud de la que goza el sector en Alemania no hace falta más que ver que, frente a caídas en la mayoría de mercados europeos, en el mes de septiembre han aumentado las ventas un 8%.
Además, creo que el cambio de hábitos en la movilidad juvenil está planteando una interesante oportunidad a los emprendedores alemanes, con un nuevo nicho de mercado que la iniciativa privada o, en su defecto, las administraciones, deberían cubrir. Dotando a esas ciudades universitarias de flotas de coches utilitarios eléctricos para alquilarlos por horas, los estudiantes que esporádicamente necesiten desplazarse podrían disponer de un automóvil en cualquier momento. De tal forma, el servicio quedaría cubierto de un modo limpio y ecológico.
Algo similar al Autolib parisino, un sistema de alquiler de vehículos eléctricos que permiten recoger el coche en un punto y devolverlo en cualquier otro lugar preparado por los organizadores. Pese a iniciarse con 46 estaciones, la intención del Ayuntamiento de París es establecer 3.000 estaciones de intercambio al finalizar el año 2012.
En la modalidad de alquiler de bicicletas, ya funciona en muchos municipios españoles con excelentes resultados. La idea del Autolib podría ser un éxito en cualquier ciudad universitaria, tanto alemana como española. Pese a que aquí una gran parte de los estudiantes se concentra en grandes urbes como Madrid o Barcelona, en localidades más pequeñas como Salamanca, Granada o Santiago de Compostela, con centros históricos de origen medieval y circulación complicada, podría ofrecerse algo parecido a módicos precios especiales para universitarios. Porque, aunque no hay investigaciones similares en España, estoy seguro de que les pasa igual que a los alemanes, que comienzan a sentir «tirria» hacia automóviles que no necesitan para nada y que en muchos casos son una fuente de gastos descontrolados.
Oct 28 2011
EL SUPERLUJO, ÚNICO SALVAVIDAS PARA LA INDUSTRIA DEL AUTOMÓVIL
Es irónico observar como, mientras muchos de los habitantes de la zona euro y Estados Unidos se han visto sometidos a un empobrecimiento generalizado por culpa de una crisis de dimensiones épicas, un selecto y afortunado grupo de individuos se ha encontrado con que su patrimonio se ha incrementado hasta límites insospechados. Y es que es un hecho cierto que, cuando el nivel económico general baja, hay unos pocos que se enriquecen.
En palabras de Torsten Mueller-Oetvoes, consejero delegado de Rolls-Royce, citado por Expansión: «el número de súper ricos en todo el mundo está creciendo; actualmente hay unos 90.000, pero se espera que en diez años la cifra alcance los 125.000». Esta veta la están aprovechando, además del fabricante inglés, otras marcas de coches de lujo como Ferrari, Maseratti, Bentley o Porsche. Todos presentan unas cifras de ventas envidiables, que ensombrecen las de años anteriores. En lo que va de año, frente a caídas del sector del 20,7%, el subsegmento del superlujo ha crecido un 14,6%.
No obstante, estos crecimientos que harían frotarse las manos a cualquier responsable de ventas podrían ser aún mayores si no fuese porque estas marcas quieren mantener su exclusividad y sus producciones anuales son muy exiguas. Para que se hagan una idea, Ferrari ha cerrado el primer semestre del año con 3.577 vehículos entregados a clientes, lo que haría un 11,7% de subida respecto al mismo período del año pasado.
Pero lo curioso de marcas como Ferrari es que sus beneficios no sólo crecen gracias a un mayor número de unidades vendidas. Se estima que en torno al 80% de los ingresos del «cavallino rampante» proceden del merchandising: gorras, relojes, bicicletas, bolsos,… Cualquier cosa susceptible de colocarle un logo se vende con gran facilidad. Y es que, según han expresado en varias ocasiones desde Maranello, el objetivo no es que muchos clientes tengan un Ferrari en su garaje, si no que muchos deseen guardar uno en su parking.
Esa deseabilidad de marca hace que muchas personas, en cuanto tienen fortuna en los negocios –o les toca la lotería-, caigan rendidas bajo el encanto decadente de un automóvil de superlujo. Si antes lo habitual era que se comprasen un Mercedes o cualquier otra marca premium, hoy en día los nuevos ricos pican más alto y sólo se conforman con coches como el Bugatti Veyron, el Bentley Continental GT o el Maybach 62 S.
¿A qué se debe este crecimiento? Básicamente a los mercados emergentes. Los negocios en China funcionan mejor que nunca, generando una nueva camada de multimillonarios apasionados por el lujo europeo más refinado y con afán de ostentación.
Pero no son los únicos que tienen dinero contante y sonante para gastarlo en vehículos inalcanzables. En Rusia, las grandes fortunas están en manos de jóvenes excéntricos y exhibicionistas. Por no hablar de los empresarios abudabíes o hindúes, menos jactanciosos pero con el mismo afán por difrutar de los placeres más refinados y exclusivos.
Multimillonarios por herencia o por pelotazos rápidos, que han transformado las viejas costumbres de la élite. Si antes creían en valores como el esfuerzo, el trabajo duro y la discreción; ahora son hedonistas encantados de conocerse que prefieren disfrutar de la vida a un ritmo acelerado, mostrando a los demás el éxito y el poder que han alcanzado. Y de esa vanidad se aprovechan los fabricantes para sanear sus cuentas de resultados.
By Altrade • General • 0 • Tags: bajada en las ventas de coches, bentley, Bentley Continental GT, bugatti, Bugatti Veyron, caída en las ventas, coches de superlujo, ferrari, Maseratti, matriculaciones, Maybach 62 S, millonarios, nuevo, opinion, porsche, ricos, ROLLS-ROYCE, superlujo, vehiculo